Una actualización de cifras señala más de 2 mil 700 muertos 14 mil heridos y miles de edificios destruidos.
Los servicios de salvamento turcos seguirán trabajando durante la noche para intentar rescatar a heridos y desaparecidos que han dejado los seísmos.
En la madrugada del lunes, un terremoto de magnitud 7,8 en la escala de Richter sacudió el sureste de Turquía y el norte de Siria.
Nueve horas después, un segundo temblor de 7,5 se ha registrado en el centro de Turquía, un país situado en una de las zonas sísmicas más activas del mundo.
Los temblores, seguidos de decenas de réplicas, dejan ya más de 2.700 muertos, 14.000 de heridos y un número aún por estimar de desaparecidos.
En Turquía hay al menos 1.651 fallecidos y 11.119 heridos, según las autoridades, que cuantifican también 2.834 edificios derrumbados.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado que su país vive “la mayor tragedia” desde el gran terremoto de Erzincan en 1939, que dejó 30.000 fallecidos, y advierte de que la cifra de víctimas puede ser aún mayor.
En Siria se han registrado más de 570 muertos y 1.403 heridos en zonas controladas por el Gobierno y otros 480 muertos y 1.500 heridos en la zona del noroeste controlada por los rebeldes, donde han colapsado más de 400 edificios.
Los equipos de salvamento turcos no tienen previsto parar durante la noche las labores de rescate, con ayuda de focos y generadores seguirán trabajando por turnos dado que cada hora cuenta a la hora de salvar a las víctimas.
Además, algunas de las localidades afectadas aún no han podido ser alcanzadas debido a los daños en las carreteras y a las malas condiciones atmosféricas.
También las autoridades sirias y los rebeldes sirios han dicho que el balance de víctimas será lamentablemente superior al que hay ahora mismo. Lo mismo ha afirmado la Organización Mundial de la Salud.
Tras los terremotos han comenzado a conocerse los daños causados en el patrimonio turco y sirio.
El castillo de Gaziantep, uno de los que mejor se conservan en Turquía y que data del siglo II antes de Cristo, ha sufrido importantes daños en sus muros, además, se han registrado derrumbes en varias mezquitas de ambos países.
En Siria, la ciudadela de Alepo y otros lugares arqueológicos también han sufrido daños: se ha derrumbado parte del molino otomano de la ciudadela y se han producido grietas en los muros defensivos.
El Ministerio de Educación sirio ha ordenado el cierre de todos los jardines de infancia, escuelas y universidades del país durante una semana por los terremotos.
El ministro de Educación sirio, Darem Tabaa, ha declarado que, “tras examinar las condiciones de las escuelas y el estado general de los ciudadanos”, se ha decidido suspender durante una semana el funcionamiento de los centros educativos en todo el país.
En Turquía, el Gobierno ha anunciado la suspensión de todas las competiciones deportivas “hasta nuevo aviso”, ha anunciado el ministro de Juventud y Deportes de Turquía, Mehmet Muharrem Kasapoglu.